Adiós

Una diosa de los cielos, en una gran batalla la victoria consiguió, pero no fue por su propia voluntad liberar esa guerra, simplemente su destino como ser divino y protectora de los dioses, era su deber destruir todo lo que representaba el lado opuesto de la luz, enfrentándose a su último enemigo con una simple mirada se despidió de aquel ser que alguna vez se enamoró, por que muchas veces la luz y la oscuridad son la esencia de toda forma de vida, pero siempre uno de los dos lados debe romper ese equilibrio para demostrar que tan grande es el poder de su elección y sin decir adiós todo terminó.